[vc_row][vc_column][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»][/vc_column_text][gem_divider margin_top=»30″][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1561553716331{padding-bottom: 60px !important;}»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]No se trata solamente de una de las grandes conversaciones de la industria de la moda. Crear un armario lo más sostenible también es un reto al que se enfrenta el consumidor preocupado por la situación del planeta. No se trata de no volver a comprar en grandes cadenas de moda ni de hacerlo de un día para otro. Como dice Stella McCartney, “cada gesto suma”, así que si estás decidido a que tu armario se convierta en otro (un poco más sostenible) tendrás que tener en cuenta cada pequeño detalle y pensar que no es algo que puedas solucionar en una mañana.
El primer hándicap que se encuentra el consumidor que apuesta por la sostenibilidad es el económico. Hasta ahora, prácticamente cualquier prenda que estuviese fabricada de una manera ética –con respeto al medio ambiente pero también a todos los trabajadores de la cadena productiva–, suponía pagar un extra con respecto a la ropa “normal”. La mayoría no pueden permitirse ese extra, con lo que estamos ante un problema al que se enfrenta el gran público y que no resulta tan fácil de solucionar. La moda sostenible será más apetecible en cuanto ese extra deje de existir. [/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Por eso es importante sumar pequeñas acciones sin prisas para hacerlo todo de golpe. Es importante, por ejemplo, crear un listado de marcas sostenibles. Localizar aquellas que trabajan por encargo o cuyas producciones son reducidas y de proximidad. De esta lista, además, tendrás que hacer otra con las que más te gusten (que no serán todas). Porque, al contrario de lo que se pensaba hace unos años, tratar de ser sostenible no significa en ningún caso renunciar a la estética.
También es importante tener en cuenta las grandes cadenas en las que compra la mayoría. Suelen lanzar, cada vez más frecuentemente, ediciones especiales o tener una línea eco friendly. En este sentido, Zara cuenta con su sección “Join Life”, que crece cada día con incorporaciones súper apetecibles y fabricadas con tejidos y materiales reciclados y sostenibles. Por su parte, el grupo H&M lleva tiempo trabajando en la inclusión de materiales sostenibles y avanza cada vez más hacia su apuesta por una moda ética.
Lo mismo sucede con COS, perteneciente al mismo grupo sueco y que cuenta en su colección con una línea respetuosa.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row full_width=»stretch_row_content» equal_height=»yes»][vc_column width=»1/2″ css=».vc_custom_1603887854643{background-image: url(https://magazine.adictic.com/wp-content/uploads/2020/10/int1-36.jpg?id=4386) !important;background-position: center !important;background-repeat: no-repeat !important;background-size: cover !important;}»][gem_divider margin_top=»400″][/vc_column][vc_column width=»1/2″ disable_custom_paddings_mobile=»true» css=».vc_custom_1561556193635{padding-top: 50px !important;padding-right: 80px !important;padding-bottom: 50px !important;padding-left: 80px !important;background-color: #000000 !important;}»][vc_row_inner][vc_column_inner offset=»vc_hidden-xs»][gem_divider margin_top=»130″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]
Zara cuenta con su sección “Join Life”, que crece cada día con incorporaciones súper apetecibles y fabricadas con tejidos y materiales reciclados y sostenibles. Por su parte, el grupo H&M lleva tiempo trabajando en la inclusión de materiales sostenibles y avanza cada vez más hacia su apuesta por una moda ética.
[/vc_column_text][gem_divider margin_top=»70″][vc_row_inner][vc_column_inner offset=»vc_hidden-xs»][gem_divider margin_top=»80″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1561554148183{padding-top: 80px !important;padding-bottom: 60px !important;}»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Leer las etiquetas es otro de los pasos imprescindibles en el camino hacia un armario más sostenible. Hay que tratar de adquirir prendas que estén confeccionadas con algodones orgánicos, poliéster reciclado y otros tejidos más novedosos como el bambú, el cáñamo o el Piñatex, una especie de cuero vegetal que se obtiene de las hojas de la piña. Hay que tener en cuenta que todavía queda investigar mucho más sobre cómo producir tejidos y materiales cruelty free y, que a su vez, estén libres de tóxicos y contaminantes. [/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Otra de las opciones es arreglar o mejorar la ropa que uno ya tiene, apostando por el “upcycling”. La durabilidad de las prendas es un aspecto fundamental en este proceso. En este sentido, las marcas han de tomar conciencia sobre otro aspecto clave: la transparencia. Cada vez, el consumidor reclama más información, conocer en qué lugar se produce su ropa, de qué manera y bajo qué condiciones. Apostar por el vintage –en claro crecimiento desde que comenzó la pandemia–, por el “Made to order”y por crear un armario cápsula permanente del que tirar de básicos que no pasan de moda, es otro de los retos a considerar para ser capaz, de una vez por todas, de construir un armario lo más sostenible posible.
Fotos: Cortesía de Maison Cleo.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][gem_image position=»centered» src=»4387″][/vc_column][/vc_row]
